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Cuando se utiliza según las instrucciones, la laca para el cabello es mínimamente tóxica. El contacto involuntario con los ojos, la inhalación o la ingestión de pequeñas cantidades de laca pueden producir efectos irritantes leves. La irritación debería mejorar enjuagándose los ojos o la boca o respirando aire fresco. La ingestión o inhalación deliberada de laca puede ser muy peligrosa.
La laca para el pelo se puso de moda después de la Segunda Guerra Mundial, cuando la industria cosmética adoptó el uso de la tecnología de aerosoles desarrollada por el Departamento de Agricultura para su uso con insecticidas durante la guerra. Esta transferencia de tecnología al sector de la belleza contribuyó a hacer posibles peinados femeninos como la colmena y el bouffant. Aunque el uso de la laca ha disminuido con la popularidad de los peinados más “naturales”, tanto hombres como mujeres la utilizan hoy en día.
La laca típica de hoy en día contiene polímeros (moléculas en forma de cadena) en un disolvente y, a veces, un propulsor. Tras la pulverización, el disolvente se evapora y deja una capa rígida de polímeros sobre el pelo que ayuda a mantenerlo en su sitio. El propulsor suele ser un gas licuado a presión que expulsa la laca del bote de aerosol y produce una niebla. A veces, el propulsor es también el disolvente. Debido a la preocupación por la salud y el medio ambiente, la Food and Drug Administration (FDA) de EE.UU. prohibió el uso de determinados propelentes (por ejemplo, clorofluorocarbonos y cloruro de vinilo) en las lacas. Un ejemplo de propelente utilizado actualmente en las lacas es el isobutano. Las lacas sin aerosol, como las de bomba, no contienen propelentes. Un disolvente habitual en las lacas es el alcohol. Aunque las fórmulas exactas varían según el fabricante, las lacas suelen incluir aceites esenciales o fragancias, así como agentes acondicionadores y silicona.
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PARA DIFUSIÓN INMEDIATA – 18 de octubre de 2022 – Englewood Cliffs, Nueva Jersey – Unilever Estados Unidos emitió hoy un retiro voluntario de productos al nivel del consumidor de códigos de lote selectos de productos de champú seco en aerosol producidos antes de octubre de 2021 de Dove, Nexxus, Suave, TIGI (Rockaholic y Bed Head) y TRESemmé debido a niveles potencialmente elevados de benceno.
El benceno está clasificado como carcinógeno humano. La exposición al benceno puede producirse por inhalación, por vía oral y a través de la piel, y puede dar lugar a cánceres como la leucemia y el cáncer de médula ósea y trastornos sanguíneos que pueden poner en peligro la vida. El benceno está omnipresente en el medio ambiente. Los seres humanos de todo el mundo están expuestos diariamente a él en interiores y exteriores a partir de múltiples fuentes.
Sobre la base de una evaluación independiente de los riesgos para la salud, no cabe esperar que la exposición diaria al benceno en los productos retirados a los niveles detectados en las pruebas tenga consecuencias adversas para la salud. Unilever U.S. retira estos productos por precaución. Hasta la fecha, Unilever no ha recibido ninguna notificación de efectos adversos relacionados con esta retirada.
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El benceno, uno de los 20 productos químicos más utilizados en Estados Unidos, es una sustancia química incolora que se evapora cuando se expone al aire. Según la Sociedad Americana del Cáncer, la exposición repetida a esta sustancia química se ha relacionado con el cáncer.
“A raíz de informes recientes que indicaban la presencia de trazas de benceno en algunos productos en aerosol, iniciamos una revisión de toda nuestra cartera de productos en aerosol. Aunque el benceno no es un ingrediente de ninguno de nuestros productos, nuestra revisión mostró que los niveles inesperados de benceno procedían del propelente que pulveriza el producto fuera de la lata”, dijo P&G en su retirada, y añadió: “Nada es más importante para nosotros que la seguridad de los consumidores que utilizan nuestros productos y la calidad de los productos que enviamos.”
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En 2021, se retiraron del mercado varios productos para el cuidado del cabello en aerosol porque podían contener benceno, una sustancia química cancerígena conocida, según CBS News. Los productos retirados incluían champús secos y acondicionadores de marcas conocidas como Pantene, Herbal Essences, Hair Food, Old Spice y Aussie. Y las personas que pueden haber sido afectadas por el uso de estos productos podrían considerar conseguir un abogado de retirada de benceno o un abogado de productos defectuosos.
La declaración de Procter & Gamble (P&G) sobre la retirada dijo que no había sido notificada sobre ningún evento adverso de los productos para el cuidado del cabello incluidos en la retirada. El aviso de retirada decía que el benceno puede inhalarse, ingerirse o absorberse a través de la piel y causar potencialmente leucemia y cáncer de sangre en la médula ósea.
P&G inició una revisión de sus productos en aerosol después de los informes recientes en su momento sobre la presencia de benceno en algunos productos en aerosol. La empresa encontró niveles inesperados de benceno, que procedía del propelente que pulveriza el producto desde la lata.
