Adolfo dominguezmantel
Adolfo Domínguez es una de las marcas españolas de moda de mayor renombre y tradición cuyos inicios se remontan a 1973. Desde entonces la marca siguió la misión de romper los estereotipos sartoriales en la moda, siendo pioneros en el fomento de la belleza natural, las prendas de género neutro y la responsabilidad social y medioambiental. Como parte de esa evolución constante, buscaban replantear su sistema de diseño para alinearlo con la nueva estrategia de la marca. Adolfo Domínguez es una de las pocas marcas de moda que tiene un tono de voz distintivo, es la única marca de su categoría que tiene un fuerte punto de vista y valores sobre la industria de la moda.
Adolfo Domínguez no necesitaba un sistema de marca tradicional, sino una herramienta que apoyara y potenciara su tono de voz. El proyecto se compone de dos familias tipográficas personalizadas: una sans serif neutra y atemporal (AD Basic) y una fuente de pantalla aleatoria inspirada en los alfabetos celtas tradicionales gallegos (AD Galiza).
Mi papel consistió en generar trabajo creativo con un fuerte pensamiento conceptual, desde la estrategia hasta la finalización. Diseñaba y ayudaba a dirigir equipos multidisciplinares, garantizando ideas y soluciones de diseño de alto nivel en diversos puntos de contacto.
Adolfo Domínguez Schmuck
Adolfo Domínguez es una firma de gran tradición cuyos inicios se remontan a 1973. Todo comenzó en un pequeño taller de sastrería donde poco a poco la marca fue construyendo su imagen y personalidad. Así, fue en los años 80 cuando nació el eslogan “La arruga es bella”, seña de identidad de la firma y uno de los refranes más famosos que ha dado el mundo de la moda española.
A mediados de los 80 los productores de Corrupción en Miami se interesaron por los diseños de Adolfo Domínguez. Los protagonistas de esta serie fueron vestidos por Adolfo Domínguez, rompiendo con los estereotipos sartoriales que hasta entonces habían seguido los detectives de las series de televisión: pasando de la gabardina y el sombrero al traje de lino y la camiseta.
Los años 90 estuvieron marcados por la diversificación y la internacionalización. En este periodo la cadena creció a través de tiendas propias y franquicias. En este punto, a finales de los 90, Adolfo Domínguez se convirtió en el primer diseñador español en comercializar una gama completa de fragancias con su nombre. Al mismo tiempo, en 1997, la firma salió a bolsa, convirtiéndose en la primera marca española con presencia bursátil.
Adolfo dominguez modo
Adolfo Domínguez es una firma española de moda creada en Trives (Ourense) en 1950. La marca irrumpió globalmente en los años 80, dando a la moda una dimensión espiritual y ocupando no sólo el espacio estético de la moda, sino también el de la ética, como refleja su famoso eslogan “La arruga es bella”.
En la actualidad, la firma cuenta con 381 puntos de venta en 20 países y está inmersa en un proceso de renovación hacia un modelo de consumo más sostenible. Para ello, la marca ha transformado sus procesos de diseño y producción de ropa hacia un impacto más positivo en el planeta. Adolfo Domínguez ha llegado para perdurar, no para estar a la moda.
Puedes solicitar el documento en todas nuestras tiendas identificadas con el logo INNOVA-TAX-FREE. Deberás rellenar todo el documento con tus datos personales y conservarlo hasta que abandones el último país de la UE que visites.
Una vez en el aeropuerto, puerto o punto fronterizo, dirígete a la aduana y solicita el sellado del documento antes de hacer el equipaje. Tenga en cuenta que el empleado de aduanas puede preguntarle por las cosas que ha comprado en esos países.
Adolfo dominguez parfum
Adolfo Domínguez recuerda el despertar de su alma artística: en París, en los años 60, donde estudió diseño y cinematografía. Tras aquella decisiva estancia y un revelador viaje a Londres, regresó a su Galicia natal. En la España de aquellos años, la gente seguía encorsetada en sus prendas, atrapada en estructuras y estilos rígidos. Adolfo Domínguez tenía una visión diferente: imaginaba la ropa como una segunda piel. Desde el principio, sus discretas prendas para hombre y mujer mostraban una elegancia y soltura naturales, impregnadas de poesía y emoción, porque, al fin y al cabo, según Domínguez, nos vestimos para que nos quieran.
“La arruga es bella”: La arruga es bella”. Con este audaz manifiesto estético, Adolfo Domínguez afirmaba su predilección por las materias primas naturales, cuyas poéticas imperfecciones exaltaba con su fino sentido de la sastrería. El lino se convirtió en su tejido de cabecera y en la inspiración de algunos de sus diseños más memorables. España rindió homenaje a su contribución a la moda con el Premio Nacional de Diseño, concedido en 2014.
